En el programa “La casa de los famosos”, Barby Juárez, la boxeadora, sorprendió a todos al confesar que es ninfómana y que sintió un vacío en su vida que intentaba llenar a través de relaciones sexuales. Explicó que su necesidad de tener intimidad se debía a la sensación de sentirse vacía y que necesitaba sentirse amada.
Cuando sus compañeros le preguntaron a cuál de ellos “le trae ganas”, todos pensaron que mencionaría a Sergio Mayer, Poncho de Nigris o Nicola Porcella. Sin embargo, la sorpresa fue cuando Barby reveló que es Emilio Osorio quien despierta ese deseo en ella.
Explicó que nunca ha estado con alguien más joven que ella, y que le atraen los hombres jóvenes. También mencionó que le gustaría que fueran “aguantadores”, haciendo una referencia indirecta a que le agradaría tener encuentros íntimos con él.
Emilio Osorio, al enterarse de esta confesión, mostró gestos de disgusto y sorpresa, cubriéndose con su bebida. Aunque trató de disimular, es evidente que esta revelación podría cambiar la dinámica de su relación en el programa.